La mesita del salón

Alguien colocó su última foto sobre la mesita del salón. Durante algún tiempo fue objeto de miradas de amor, de recuerdos obsesivos, fue sostenida entre dos manos excitadas, fueron cosidos a besos sus labios de papel, prolongados con lágrimas mordidas en almohadas vacías… Pero el tiempo, cruel y frío, pasa y convierte las pasiones en indiferencia, los recuerdos en neblina, emborronando matices, diluyendo horizontes. Hoy ya nadie dedica una sola mirada a ese bello rostro al pasar junto a la mesita, donde se ha convertido en uno más de los objetos impersonales olvidados sobre el cristal: un cenicero siempre vacío y roto, un botón de sabe dios qué chaqueta, un reloj detenido en la una y diez, una lámpara de porcelana sin bombilla… Ignorada en su marco de plata ennegrecida, ya nadie recuerda ni su nombre.

(Foto: retrato desenfocado de alguien)

Comentarios

  1. Quizas sea yo,quizas sea porque la luna ya esta en menguante quizas sea porque en el rostro que se difumina se adivina una media sonrisa resignada y melancolica. No se, pero me recuerda a una fotografia que nunca he visto antes...

    ResponderEliminar
  2. este blog se niega a escribir mi nombre parece que le molesto . No le gusto

    ResponderEliminar
  3. Iota, este blog no discrimina a nadie, yo leo tu nombre perfectamente :) Un beso.

    ResponderEliminar
  4. No hay nada más triste que encontrar una vieja fotografía en color sepia y no recordar a quien representa.
    Termina por ser la desconsolada representación de lo efímero que somos.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  5. Hola, .
    Me ha gustado tu frase "me recuerda a una fotografía que nunca he visto antes". Te la plagiaré sin rubor en cuanto tenga ocasión :)

    ResponderEliminar
  6. Juan, esas fotos olvidadas están en muchas mesillas de muchas casas... Y sí, recuerdan lo efímeros que somos. Por eso hay que aprovechar como lobos cualquier oportunidad que nos da esta vida tan breve :) Un abrazote.

    ResponderEliminar
  7. Espero no dejar a mi paso ninguna vieja fotografía en una mesa junto a un cenicero en desuso donde habita un triste botón exilidado.

    Un relato triste y hermoso a la vez, que nos invita, como bien dices, Diego, a vivir la vida con intensidad, la nuestra propia, para empezar.

    Y si amamoa a alguien que nos inpira besos sobre el papel, mejor dárselo piel contra piel, con un buen abrazo.

    Un fotografía borrosa siempre es algo inquietante, tanto como guardar en tu álbum algunas fotos que no recuerdas por qué las guardas y quienes son.

    Un placer visitarte, Diego.

    Besos,

    ResponderEliminar
  8. Tesa, a mí lo que más me deprime de la historia es el botón olvidado :) Ahora ya no existen esas viejas fotografías, hoy todo se pixeliza y se guarda en memorias externas que nadie abre :) Un placer que me visites :) Sicos

    ResponderEliminar
  9. PEDRICE11/07/2017

    Quizá por eso en casa no tengo fotos mías. No quiero que el día de pasado mañana, mañana espero seguir viviendo, mis biznietos, ante una foto de un personaje totalmente desconocido, puedan apostarse una cena a adivinar quien sería ese señor tan serio, con barba, y un perro verde en la cabeza.
    Que se imaginen lo que quieran, siempre será mejor que la realidad.
    Creo.......


    ResponderEliminar
  10. Eso que quieres plagiar te lo cede con muchisimo gusto Iota que se siente muy honrrada de que te haya gustado . Yo guardo una fotografia tuya pero estas de espaldas y solo se te ve un cogote braquicefalo.... que rabia si al menos se viera un poco de nariz...
    un soplo con beso volante

    ResponderEliminar
  11. Pedrice, pienso como tú. Yo no tengo fotos enmarcadas en mis no casas con una sonrisa de "patata". Así evito los olvidos mesilleros y los ¿y este tío quién es? futuros :)

    ResponderEliminar
  12. ¿Una foto mía de espaldas, Iota? Sólo recuerdo una que me hizo un hermano cuando yo tenía 15 años. Estoy en bañador haciendo pis en el corral de Mayrena. Y se me ve un poco de nariz, mi nariz es difícilmnte ocultable :)

    ResponderEliminar
  13. Coincido con. De mi gente querida y añorada, sus mejores fotos están en el disco duro de mi memoria (mientras no me falle...)
    Y de mí, espero que estén en la de mi gente querida cuando ya no esté. (pero poco tiempo, para no ser un lastre)
    :D Yo también tengo una foto tuya de espaldas... descifrando el mensaje en un árbol caído. Muy bonita. Y muy anónima, tranquilo :D

    ResponderEliminar
  14. Fram, peor que las fotos de mesillas son los cuadros de antepasados desconocidos que cuelgan de paredes de algunas casas, desde donde nos miran con gesto adusto y severo, como recriminándonos algo.
    Tengo muchas fotos de espaldas. Yo es que soy feo, cuando me van a hacer una foto, siempre me dicen "nene, ponte de espaldas". En mi DNI en vez de cara hay un culo :)

    ResponderEliminar
  15. Pues existió al sacarlo a la luz ... Mejor que fotos olvidadas es vivir los momentos y guardarlos, para cuando la añoranza llega.
    Buen fin de semana.
    Besos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario